capítulo 6

DIARIO DEL RICARD

25 octubre
Hacia un rato que ya no me aguantaba las ganas y voy al lavabo y sorpresa... ¡mi macizo, al que ni siquiera había visto entrar, está ahí descargando¡ ¡¡que rabia con las ganas que tenía yo de deleitarme con la bella visita de la TROMPA por suerte no he llegado tarde del todo. He llegado justo a tiempo en el momento en el que se la expulsaba y le he visto un poco la punta pero ¡¡que punta. Toda su trompa ya es mucho más grande que la mía entera. Su trompa es enorme, muy gorda, larga, oscura...¡¡¡es fascinante¡¡
--¿cómo te va compañero? –me pregunta mientras se va a lavarse las manos.
Hombre después de ver una cosa así pues no se puede estar mal aunque mejor estaría de haberla visto mejor. Le he dicho que bien pero no el porqué.
--eso está bien.
Se lava las manos a conciencia. Yo estaba si hacia pis así que no lo he podido seguir. Él se ha ido antes que yo acabara. En realidad no me ha hecho mucho caso. No ha contestado a lo que yo le he ido preguntando o no me ha entendido.
Yo le había preguntando que cuando había llegado, que no lo había visto entrar. He querido dejar esto claro para que se viera que nuestros encuentros “íntimos” a veces son casuales.
--yo ahora no vengo mucho... –me dice.
Luego le quiero explicar que hoy han abierto media hora tarde.
--Por eso –me ha dicho que no tenía nada que ver con lo que yo le he dicho.
Cuando yo le estaba explicando el motivo del retraso él me ha interrumpido:
--es que hacen lo que quieren –y no me ha dejado continuar.
--venga hasta luego –me ha dicho ya en la puerta y con cara de pensar “no seas pesado y déjame en paz”
De hecho a mi lo que me interesa es verle la trompa y no hablar con él.

Noche.
Esta tarde yo estaba en mi ordenador y oigo que una suave voz que no reconozco me dice:
--buenas.
Alzo los ojos y me encuentro con mi tío bueno que me sonríe y alza la mano. Es tan guapo y le queda tan bien esa cazadora de piel y con esos tejanos tan viejos, le da un aspecto sensual que me encanta. Me gusta mucho pero desnudo tiene que ganar mucho. Le ha tocado al lado de mi prima Isabel ¡¡que envida¡¡ con una tonta excusa yo me he levantado para hablar con ella y justo en ese momento él se levanta y entra en el despacho para hablar de un problema que ha tenido ¡¡que rabia¡¡ Si no hubiera sido porque mi prima ha venido conmigo a casa seguro que me habría podido entretener para ir con él pero no le quiero dar el disgusto a mi tía de que sepa que ando en malos pasos. No me dejaría tranquilo. Aunque no hemos podido irnos juntos hemos salido el uno tras el otro y lo he podido ver bien.
A los pies de la finca de Bárbara, hay un pequeño pueblo. Omar lleva días alojado en la pensión.
--es como en el sueño... algo me impide llegar a esa haciendo... ¿por qué el miedo? He venido a este lugar para averiguar lo que pasó ¿por qué ahora temo ir? Es como si presintiera que voy a encontrar algo que no me va a gustar. Cada vez que voy acercándome... veo de lejos ese lago... ¡no puede ser el del sueño¡
Omar trata de calmarse:
--tal vez es que mi subinconsciente me quiere decir algo... ¡¡no claro que no¡¡¡eso es una tontería¡¡¡lo que tengo que ir es ir a ese lugar, presentarme y ya está¡¡¡lo que pasa es que he hecho un misterio de todo esto y a lo mejor no hay nada que averiguar... tengo que ir... mañana iré sin falta... sí... mañana voy a salir de esta...
Está muy metido en sus pensamientos. Le suena el móvil. Se da cuenta que es su novia. Tiene ganas de no contestar.
--debe estar muy molesta, pero tengo que contestar... no puedo seguir así...
Yazmine grita está histérica...
--¡¡¿qué es esto?¡¡me dijiste que solo eran dos días y mira ya lo que llevas... ¡¡me he tenido que enterar por tu trabajo que has pedido un mes de vacaciones¡¡¡por eso yo te quería retener y tú me hiciste creer que no irías y te fuiste sin decirme nada... --¡es que tú nunca escuchas¡¡
--¡¡eso no es cierto¡¡¡quiero que dejes toda esta tontería y vuelvas a la casa¡
--no puedo sin averiguar lo que quería...
--¡¡pues hazlo de una maldita vez... no cuesta tanto hacer una simple pregunta¡¡
--es que la cosa se me ha complicado... tengo miedo a preguntar...
--¡pues vente¡
--¡no es tan fácil¡
--¡¡todo esto es una mentira... lo que quieres es abandonarme¡¡
--mañana iré...
--¡más te vale porque sino averiguaré dónde está esa maldita hacienda e iré a buscarte¡

Al día siguiente casi al amanecer, Omar conduce hasta la finca pero ese día es diferente. Es como si el lago lo llamara. Aunque quiere ir hacia la casa va hacía el lago... Se queda muy impresionado...
--¡es el del sueño... es el del sueño¡¡debes calmarte... eso no quiere decir nada... estuviste aquí de niño... por eso lo recuerdas... es imposible que un sueño sea verdad...
Se queda un buen rato mirando el agua esperando, que como en el sueño, se escuche la voz de su padre. Pasa un rato y no se oye nada.
--¡lo ves... todo era mentira... ¿qué es lo que esperabas encontrar?
Siente atracción por ese lago. Es como si lo llamara... se va acercando... cree que no va a poder acercarse pero mete el pie y se moja.
--¡esto es un lago normal... no hay ningún misterio aquí¡
Se quiere ir pero se siente demasiado atraído, es como si una fuerza poderosa le dijera que eso es lo que tiene que hacer. Se desnuda totalmente y se mete en el agua. Se siente bien.
--¿lo ves? –se dice—todo es normal.
Quiere salir pero por un momento se le olvida que está en una propiedad privada y se baña tan a gusto. Marcos llega en ese momento. Se sorprende al ver que hay alguien. Llega hasta la ropa...
--¡está desnudo¡
Desde el agua Omar se da cuenta que no está solo, sale pero el agua le llega hasta la cintura. Marcos se lo mira boquiabierto...
--es él... es él... es el hombre de mis sueños... seguro que es él –susurra emocionado.
Omar se disculpa, quiere pedirle la ropa pero el chico se asusta y se va corriendo. Él quiere alcanzarlo pero se acuerda que está desnudo. Sale divertido por la situación. Se empieza a vestir.
--será mejor que vaya a la casa, mejor que se sepa de mi presencia por mi, no sea que ese niño cuente algo que me deje mal parado... ¡¡es que sólo a mi se me ocurre bañarme en bolas en un lugar ajeno¡
En su coche llega a la finca. Tarda porque le cuesta encontrar el camino. Marcos corre veloz por la finca. Está asustado por la presencia del desconocido pero no puede negar que le ha gustado.
Al llegar a la casa, Omar da vueltas ya que nadie lo atiende.
--vine muy temprano... todos deben dormir menos ese niño –sonríe al pensar en Marcos.
Elena acaba por ir a recibirlo:
--¿tú? –dice sorprendida.
--¿me conoce? –pregunta él esperanzado.
Doña Elena se pone muy nerviosa:
--¡es que creí que lo conocía¡
El nervioso de la cocinera hace sospechar a Omar.
--¡¡usted conoció a mi padre... ¿verdad? ¡¡¡¿qué sabe de él?¡
--¡¡deja ya el pasado... su padre era un buen hombre... pero a los muertos hay que dejarlos descansar en paz¡
A Omar se le desencaja el rostro:
--¡¡entonces sí está muerto¡¡¡lo mataron¡¡¡¿qué pasó?¿¿¡¡dónde está su cuerpo¡¡
--¿cómo?.... es que su padre no murió? –dice la mujer nerviosa al darse cuenta que metió la pata.
--¡¡mi padre desapareció y nunca nadie supe nada de su paradero¡¡¡¡Yo he venido a este lugar para averiguar lo que pasó...¡¡¡no me puedo creer que lo mataron¡¡¡
Los nervios de la empleada aún la delatan más:
--no haga caso a los chisme de esa vieja... ¡¡¿cómo iba a saber yo que su padre está muerto y usted no¡¡
--¡¡porque usted vivía en esta casa y yo no....¡¡
Temblando y procurando no revelar nada más que la pueda comprometer, doña Elena dice:
--si hubiera muerto pues ustedes hubieran sido los primeros en saberlo... digo...
--¡¡no si lo mataron... si lo enterraron como a un perro...¡¡¡¿qué hicieron con el cuerpo de mi padre?¡¡¡
--¡pero por favor... no grite que va a despertar a todos los de la casa¡¡
--¡¡pues que se despierten... voy a llamar a la policía para que se averigüe la verdad¡¡¡
--pues sí me quiere llevar a la cárcel por vieja... pues hágalo... yo me confundí... creí que su padre murió... usted dice que no... y yo que me alegro...
--¡pues no le creo nada¡¡
--ay hijo por Dios... yo soy una vieja... ¡¡porque te iba a mentir¡¡
--¡¡¿por qué usted está protegiendo al asesino de mi padre?¡¡¡¿quién es?¡
Doña Elena para sí:
--¡no puedo... no se lo puedo decir¡¡
Omar la mira amenazante y dice:
--¡yo de aquí no me voy hasta que usted me diga la verdad¡¡
---¡¡yo no tengo nada que decirle¡¡
Omar se deja llevar por sus nervios y agarra del brazo a doña Elena:
--¡dígame la verdad¡¡
Marcos entra en ese momento y le parece que la está atacando. En seguida grita. Omar se gira y los dos se sorprenden mucho al verse.
--¿tu? –dicen los dos a duo.
Marcos no se atreve a mirarlo a los ojos. Se ruboriza al recordar que casi lo vio desnudo.
--¿ustedes se conocen? –pregunta la cocinera para desviar el tema.
Marcos mira al hombre decepcionado. Había pensando que podría ser el hombre de sus sueños pero se da cuenta que no, un hombre que ha tratado tan mal a doña Elena no puede ser bueno...