martes, 7 de septiembre de 2010

capítulo 18


DIARIO DEL RICARD
4 enero del 2003.
Ayer vi al López.. Saluda muy simpático a uno (el que le tocó el culo). Ese se le acerca y el Lopez lo recibe muy cariñoso. Se abrazan. El otro lo abraza por el cuello y ¡hasta le da dos besos en la mejilla¡¡ Luego los dos se van al sitio de ese otro, a mi lado y siguen hablando. Cuando el López se va se acerca a despedirse de él pero a mi ni me mira. Ya no me fío de él. Pienso en lo que me dijo Antonia que era falso y tal vez era verdad... prefiero no hacerle caso... Verlo tan cariñoso con otro me ha hecho sentir muy celoso y lo rechazo aún más... aunque que está bueno... lo está... aunque su trompa es lo mejor que tiene...

9 enero
Desde el instituto ningún tío bueno me daba la mano y el primero desde entonces no podía ser otro sino él, Francisco López. Me gusta porque siempre es bonito tener contacto con un tío bueno macizo y porque
Es una manera de recuperar lo que tenía antes y aunque ahora no estoy seguro que sea sincero a mi me gusta y me anima. Eso sí ya no me parece especial. No lo he visto entrar. Me he dado cuenta con una chica que está delante de mí. Yo hago como si no lo viera. De repente veo que él me silba y flojito y simpático me dice:
--hey... Ricardo...
Yo ya me había dado cuenta que se quería acercar a mi pero lo dudaba. No sé si de verdad es porque no se atrevía para no molestarme o que no tenía ganas pero pensaba que tenía que hacerlo por compromiso.
--feliz año –me dice sonriendo y me extiende la mano.
Nos las chocamos. A mi me encanta tocarlo.
--estamos perdidos –me dice—te había visto otros días pero te veía tan concentrado que no me he atrevido a decirte nada por si se te va la inspiración.
Me desconcierta un poco porque no sé lo que piensa de mi pero me justa estar cerca de un tío bueno como él.

15 enero
Hoy el López se ha sentado a mi lado en el ordenador. Me gustaba tenerlo cerca. Me decía cosas aunque yo no lo oía bien. Y ha ido al lavabo y yo detrás pero sólo se ha lavado las manos y yo me decepciono. Él no me dice nada ni yo a él. Al menos le veo bien el culo que me encanta.
--bueno compañero –me dice al despedirse.
Yo estoy girado porque me gusta ver el culo cuando camina. Él se gira, sonríe y me saluda con la mano. Está más simpático que de costumbre, más atento... así como antes... A lo mejor se ha dado cuenta que me dolía su distanciamiento y que por eso estaba triste... No quiero que esto me excito demasiado... pero me encanta haberlo tenido tan cerca en el lavabo... que lastima que bueno...

28 enero
Hoy he visto al López. Ya ha desaparecido cualquier resquicio de rencor. Lo he sentido como antes... ¡me tiene loco¡ Las palabras me dan miedo porque no me quiero ilusionar de más... pero me encanta... Es muy guapo y simpático. Me gusta mucho verle. Se me acerca sonriente:
--que tal Ricardo... todo bien?
¡¡Cómo me gusta¡¡ Es muy guapo y su culo me fascina... Es pequeñito y le sobra mucho pantalón... le sobra un colgajo que... que ganas que engancharme de ahí y agarrarle lo que le pille. Me gusta verlo caminar, es muy sexy. Me pone a 100. Estoy muy volcado en las novela que escribo donde puedo amar libremente pero las hormonas son las hormonas... está un buen rato a mi lado y yo me caliento. Sé que mis sueños no se harán realidad pero me gustaría a volver a amar, a volver a sentir el placer del cuerpo, de un cuerpo sobre el mío. Ya soy mayor de edad (de hace siglos)... no tengo que rendir cuenta de nadie... lo máximo es que me podría pasar es que el abuelo me sacara la pensión que me da... pero si mi López me hace caso y él me protege pues me olvido de todo... hasta vuelvo a buscar trabajo... Aunque me da miedo que no sea sincero pero ¿por qué no ha de serlo? Él no sabe nada de mi y bueno ahora no es como antes... no tengo en que caerme muerto... Ni modo que me quiera enamorar por dinero.
--bueno, Ricardo... nos vemos...
No va al lavabo y yo que estoy tan excitado que me moría por verle la trompa... es lo único que puedo lograr pues me tengo que conformar

29 de enero.
He visto al López que le hace un masaje en el cuello a su chica... Está de lado y le veo su culo... Me encanta... también se le ve un buen bulto en el paquete... Por cierto que mi prima Antonia lo mira raro... No sé que lo recuerde con tanta manía... parecía celosa a mi no se me quita de la cabeza que algo pasó... pero en fin... no es cosa mía.
A la hora de marchar paso por donde está él para tocarlo. Me pone muy cachondo... le toco el hombro. Tengo las hormonas tan revolucionadas... es que su cuerpo vuelve loco a cualquiera. Su culo... me enloquece... me gusta verlo caminar. Una cosa... su chica está algo más gordita e iban con bolsas de cosas de bebé... Ella puede estar engordando por foca y lo del bebé puede ser para un regalo... No sé... me ha puesto mal pensar que él pueda formar una familia y yo siga solo y amargado...

8 febrero
Me he sentado en el ordenador en el que estaba él. Me he dado cuenta que había una impresión suya. Era la hoja de control de lo que había gastado. Pone su nombre completo: López Fernández Francisco J.
Él vuelve al rato y yo le doy la hoja. Es una tontería pero se pone muy contento, como si le hubiera salvado la vida.
--pues te lo agradezco, macho –me dice muy simpático.
Se le agradece lo de macho aunque seguro que mi padre se está revolviendo en su tumba ya que no fui precisamente su orgullo. Aunque a veces he querido ocupar su lugar porque él me mató el alma, ahora no. Estoy contento de estar vivo. Él pagó por su delito. Y si yo tuve culpa de algo pues he pagado con mi soledad y con casi 15 años de sufrimiento.

Marcos y Omar pasean junto al lago. Marcos está algo triste. Omar lo mira con dulzura.
--¿que es lo que te pasa, mi amor?
--es que te amo tanto... pero no me gusta tener que vernos así a escondidas... Tengo 16 años, pronto cumplo 17... No sé a que tenemos que esperar... Hasta Yazmine ya nos deja en paz... Yo creo que podemos formalizar... No sé... seguro que a mi edad todos los chicos ya lo saben todo...
Omar acaricia al chico con dulzura y dice:
--¿qué es ese todo que todos los chico saben y tú no?
Marcos lo mira con cierta timidez y dice:
--pues... eso... hacer el amor...
Omar le sonríe:
--¿y porque esas prisas?
--es que quiero demostrarte lo mucho que te amo... quiero darte mi primera vez como regalo de amor...
Se miran frente a frente. Omar lo acaricia, lo besa:
--Yo sé que me amas como yo te amo a ti... No necesito tu primera vez para saberlo...
--pero yo quiero...
--eso será un regalo muy hermoso pero a su debido tiempo...
--¿es que crees que lo nuestro no es importante? Llevamos meses juntos...
--Pero aún nos queda mucho por vivir... no hay que tener prisa...
--¡¡pero yo quiero hacerlo¡'¡
--Menos mal que no sales a la calle... si no... No debes dejar influenciarte por lo que ves en la tele... Es posible que los chicos de tu edad ya sepan lo que es él sexo pero luego vienen las decepciones, la desilusión...
--Yo sé que no...
Omar sonríe paciente. Van paseando bien abrazados:
--los chicos como tú sois muy soñadores... si las cosas se hacen con prisas luego no se cumplen las expectativas... tú podrías llegar a odiarme por sentir que yo te he obligado a hacer algo que no querías...
--Yo sé que no.,..
Omar lo besa dulcemente:
--Yo soy mayor que tú... hazme caso...
--pero es que ya soy un hombre.
--pues por lo mismo... tienes que actuar con responsabilidad....Incluso nos podríamos casar. ¿no te gustaría llegar virgen al altar? Vivir tu primera vez conmigo la noche de bodas...?
--me gustaría estar contigo siempre pero ya...
--eso no puede ser...
--pero es que me gustaría que seamos una pareja como todas...
--tú sabes que no somos una pareja como todas... ¿crees que yo no siento miedo? Temo que tú te acabes dando cuenta que no me amas, que fue una ilusión... –Omar.
--eso no pasará...
--temo que cuando tu madrastra se entere no te deje salir conmigo...
--a ella nunca le ha importado lo que yo haga...
--te puedo asegurar que sí le importará que seas novio de un empleado y negro...
--la raza no importa a la hora del amor...
Los dos se toman de la mano. Omar le agarra la mano y se la pone junto a la suya en su corazón:
--lo sé... el amor es algo más que el color de la piel... pero tengo miedo de no poder luchar contra la intolerancia de muchos... Mientras esto siga siendo un secreto pues está a salvo de la maldad de la gente... además... eres menor de edad... recuérdalo... No vamos a poder luchar contra eso... Te juro que es mucho mejor vernos en secreto hasta que tengas los 18 años que no vernos hasta entonces...
--¡No, no... esto no lo soportaría...¡ --Marcos angustiado.
Los dos se besan. Todo parece que está bien pero Marcos vuelve a protestar.
--¿y ahora que te pasa? --Omar.
--es que me gustaría tanto bañarme... pero contigo...
--Ya sabes que no... no es prudente..
--¿pero porque?
--Ya sabes,...
--es que no me parece lógico... si tienes miedo que pase algo entre nosotros es porque quieres que pase...
--es que es mejor no hacer cosas buenas que parezcan malas... si alguien nos descubre mejor que sea entre besos y caricias que no haciendo algo que se pueda malinterpretar...
--a mi no me importa lo que digan lo demás...
--pero a mi sí me importa lo que digan de ti...
Omar lo calla con un beso y a Marcos se le olvida todo.

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