capítulo 20

Omar está lleno de odio y su mirada lastima a Marcos. Doña Elena trata de protegerlo entre sus brazos. Lo quiere sacar de la cocina.
--vamos, niño... Omar está muy furioso...
Marcos se enfrenta a él y le dice:
--¡¡yo quiero que se atreva a decirme en mi cara si es cierto que se acercó a mi para descubrir lo que pasó con su padre¡¡
Todos siguen hablando sin saber que Yazmine los está escuchando.
Desesperado, Omar dice:
--¡¡te das cuenta que tu hermano es el primer sospechoso del asesinato de mi padre¡¡¡?
--¡¡yo no tengo la culpa de lo que pueda haber hecho un hermano que hasta hoy mismo no sabía que existía¡¡
Omar se lleva las manos a la cabeza desesperado:
--¡¡yo no puedo creer eso¡¡
Doña Elena llorando dice:
--¡¡es cierto... Marcos no sabía nada¡¡
Omar se acerca a la cocinera y dice:
--¡¡si usted no dice otra cosa es porque es verdad... es porque mi padre fue asesinado por ese degenerado¡¡¡¿dónde lo enterraron?¡¿dónde?¡
Doña Elena no deja de llorar. Marcos no deja que Omar la siga molestando y dice:
--¡¡deja ya a doña Elena... yo te hice una pregunta¡¡¡¡quiero saber si me enamoraste sólo para saber de ese supuesto crimen¡¡
--¡¡no fue ningún supuesto crimen¡¡a mi padre lo mataron y hasta que nadie me diga lo contrario lo mató tu maldito hermano¡¡¡es que si ahora lo tuviera en frente lo mataba con mis propias manos¡¡
--¡¡no hable así de mi niño Ricard¡¡ --llora Doña Elena.
--¡¡su niño Ricard es un asesino y aunque se esconda debajo de las piedras lo voy a encontrar y lo voy a meter en la cárcel¡¡ --grita Omar con odio.
--¡las cosas no pasaron así¡¡ --dice la cocinera angustiada.
--¡¡pues dígame cómo pasaron las cosas¡¡ --Omar.
Doña Elena no dice nada, llora.
--¡dejala ya y dime de una vez si...¡ --Marcos
Omar está cansado de la misma pregunta que ya sabe cuál va a ser y aunque no es cierto desea herirlo de la misma manera en la que él se siente herido y dice:
--¡¡si, sí... fue por eso¡¡me acerqué a ti para saber la verdad de ese crimen¡
Esta confesión parte el alma a Marcos. Yazmine no ha perdido detalle de lo que ha ocurrido y sonríe feliz.
--lo sabía, lo sabía –dice para sí—él me ama, él me ama... no podía ser que tuviera nada serio con ese niño¡
Destrozado, Marcos bofetea a Omar y le dice:
--¡te odio, eres un monstruo¡¡no te quiero volver a ver en mi vida¡¡vete antes de que le cuente a la señora Bárbara lo que ocurre y te echen como un perro¡
Omar lo mira herido y dice:
--¡me voy pero volveré... volveré cuando tu hermano esté en la cárcel y yo sepa donde está enterrado mi padre¡
Omar se va dando un portazo. Yazmine ya no está, ha subido a las habitaciones. Marcos mira a doña Elena llorando. Espera que ésta le explique lo que ha pasado pero la cocinera está tan desesperada que se va corriendo a su cuarto y se encierra. Llora rota de dolor.

Bárbara está en su cuarto y se sorprende al ver que Yazmine entra sin llamar. Se enfurece.
--¡¡desde cuando las criadas entráis en la casa de la señora de la casa sin llamar¡
--desde que sé que su hijastro Richard es un asesino...
Bárbara no sale de su sorpresa:
--¿cómo?
--Mi marido entró en está finca para averiguar porque murió su padre, el que fuera capataz hace unos años.
Bärbara se asusta:
--¡por eso su mirada me sonaba¡
--¡ahora ya lo sabe... ya sabe que a su padre lo mató su hijastro y que por eso está desaparecido¡
El miedo desaparece de la mirada de la mujer:
--¿y que es lo que quiere?
--su otro hijastro se revuelca con él...
--¡¡no, no... no puede ser¡
Bárbara está como loca:
--¡tengo que acabar con ese negro antes que investigue más o se quiera quedar con Marcos para sacarme mi herencia¡ --dice para sí.
Yazmine no se da cuenta de la gravedad de los hechos, sólo piensa en ella.
--¡yo me quiero llevar a mi hombre... se me ocurre un pequeño plan... usted y yo juntas podemos ayudarnos...¡
Bárbara la escucha aunque sólo si los planes de la Yazmine son iguales a los suyos habrá alianza, a pesar de eso la escucha como si fueran aliadas...


Omar está desesperado. Roto de dolor llega al lago. Se saca toda la ropa y desnudo nada. Nada para callar su dolor. No puede dejar de pensar en sus besos con Marcos, en sus encuentros en ese mismo lugar. Luego recuerda lo que ha descubierto sobre su padre. Llora sangre. No soporta pensar que, aunque de una manera indirecta, su amado pueda estar implicado en todo eso. Desearía no haber ido nunca a ese lugar.
--¡¡ojalá nunca hubiera sabido la verdad, ojalá nunca lo hubiera conocido a Marcos¡¡
el guapo negro nada con una gran violencia como si así disminuyera el dolor de su alma.
Marcos está tumbado en su cama llorando. Piensa en los bonitos momentos vividos con Omar y llora.
--me engañó... se burló de mi...
Alguien llama a la puerta.
--¡¡no quiero ver a nadie¡¡
Entra Yazmine con un vaso. Se hace la que no sabe.
--perdona que me meta, no sé lo que debe haber pasado... seguro que es una pelea de enamorados cualquiera... Omar es tan impulsivo...
Marcos se levanta.
--¿dónde va?
--¡¡quiero ir al lago¡¡¡
--¡pero cuando llegue ya será de noche... es muy peligroso¡¡¡mejor tómese este zumo que le he preparado¡¡
--gracias pero no me apetece...
Yazmine finge dulzura:
--ay no me diga eso… yo se lo he preparado con mucho cariño…
--quiero estar solo –dice deshecho.
--pues yo no me voy hasta que usted se beba mi zumo...
Marcos se lo bebe de golpe ante la satisfecha mirada de Yazmine.
--¡¡contenta... ahora se va a ir?¡ --le dice Marcos molesto.
Yazmine sonríe y dice para sí:
--muy bien querida... la droga no tardará en hacer efecto.
Marcos pronto se encuentra mal.
--¿le ocurre algo, señorito? –pregunta Yazmine como si lo quisiera ayudar.

Marcos está tumbado en su cama sin conocimiento, entre Bárbara y Yazmine lo sacan de la habitación una por la cabeza y otra por los hombros. Van con cuidado que nadie las vea.
--yo digo que un hombre nos vendría muy bien –Yazmine.
--si pero es que no me fío de nadie...
Las dos llegan al cuarto de Omar y dejan al adolescente en la cama. Las dos mujeres sonríen ya que nadie las vio.
--bueno... ahora el resto es cosa tuya...
Bárbara se va y luego Yazmine empieza a desnudar a Marcos.
--¡te vas a enterar de lo que les pasa a las perdidas que se meten con mi hombre¡¡
Marcos queda desnudo dentro de la cama de Omar. Luego la mujer escribe una nota que deja al lado del joven y recoge todas las cosas del que fuera su pareja.

Sin sospechar las maquinaciones de Yazmine y Bárbara, Omar sale del agua totalmente desnudo. Se acerca a su ropa. No se da cuenta que, tras unas matas, el chino disfruta con el cuerpo desnudo bajo la luna del apuesto capataz.
--¿¿quién anda ahí? –dice el capataz con los pantalones en la mano.
El chino se asusta ya que cree que lo han descubierto pero de repente se da cuenta que de la nada aparecen varios hombres armados con palos y, sin que tenga defensa, le dan una gran paliza a Omar. Parece que lo vayan a matar. El chino no sabe qué hacer. Cuando Omar está en el suelo más muerto que vivo, uno de los tipos saca un arma y lo apunta dispuesto a acabar con su trabajo. Al ver que van a matar al negro que tanto le gusta, el Chino sale de los matorrales gritando y se lanza hacia ese hombre. Le disparan al acto y cae al suelo muerto. Esto desconcierta a todos ya que no esperaban a ese intruso y menos que lo mataran. Lanzan el cuerpo del Chino al agua y, seguros que está muerto, hacen lo mismo con el del guapo negro sin dispararle.
Mientras, en los límites de la hacienda, Yazmine espera que, tal y como quedó con Bárbara, unos hombres le traigan a su Omar. No imagina que Bárbara ha hecho unos pequeños cambios a su plan.

Omar se está sumergiendo, parece que su muerte será inevitable pero de repente una fuerza que sale de la profundidad lo arrastra hasta la superficie y aunque sin conocimiento logra salir. Aturdidos por los cambios de planes y sin querer dar cuentas a Bárbara, los hombres se van sin acordarse de asegurarse de que Yazmine deja la finca. Lo que no contaba Bárbara es que Yazmine no está dispuesta a irse sin su amado. Así que lo va a buscar. Así llega hasta el lago y se lo encuentra mal herido.
--¡¡maldita sea, me traicionaron... esto no fue lo que planeamos¡¡